¿Depender del transporte público o manejar un auto propio?

¿Depender del transporte público o manejar un auto propio?

En Culiacán, el sistema de transporte público resulta todavía muy deficiente y no hay condiciones para otros medios de transporte como la bicicleta o el traslado peatonal. Además, el costo del transporte público no compensa el servicio que se recibe, pues hay unidades en mal estado, algunos choferes no tratan con cortesía al pasajero y ahora, con la pandemia, no todos cumplen con los protocolos sanitarios.

Por último, los accidentes en los que participan camiones urbanos son frecuentes, las condiciones mecánicas de los camiones dejan mucho que desear, no respetan los límites de velocidad, tienen una elevada emisión de humo y en ocasiones viajan con exceso de pasajeros, lo que en la pandemia puede resultar incómodo y hasta peligroso.

Así, durante la pandemia, cada día parece que la rutina diaria se vuelve un poco más difícil y extraña.

Podemos sentir que estamos perdiendo un poco de nuestra libertad cuando vamos y venimos del trabajo o nos ocupamos de cuestiones simples y cotidianas. Gran parte de esa sensación proviene de la forma en que nos desplazamos durante esta pandemia.

Si tiene suerte, el transporte público ha resuelto sus necesidades de desplazamiento durante mucho tiempo. Como usuario de los camiones, uno se somete a sus horarios, sus rutas y sus normas (aunque no todo el mundo las sigue).

Sin embargo, tener un coche propio puede cambiar estas restricciones y ayudarlo a liberarse del estrés que supone tener que desplazarse durante esta pandemia. Pero, ¿vale la pena, y puede permitirse un vehículo propio de segunda mano?

Las grandes diferencias entre el transporte público y ser dueño de un auto propio

Quizá piense: “El transporte público funciona, ¿por qué voy a molestarme en gastar dinero en mi propio coche?“. Mientras que los camiones pueden preferirse cuando no quiere conducir, hay cuatro grandes factores que debe tener en cuenta cuando considera tener su propio coche.

1. Conveniencia

Cualquiera que haya usado el transporte público sabe que hay horarios irregulares poco confiables y limitaciones en cuanto a las rutas específicas que siguen los camiones. En una ciudad lo suficientemente grande como Culiacán, puede haber un buen rango de horarios de servicio para llegar a donde necesite. 

Pero, ¿qué ocurre si pierde el autobús para ir al trabajo? Aunque tome el siguiente, llegará tarde al trabajo. Además, ¿qué pasa si tiene que ir a un sitio donde no pasan los autobuses? ¿Y si el transporte público no es seguro? ¿Y si hay una emergencia a mitad de la noche? 

Puede ocurrir que alguien de la familia se enferma o sufre un accidente y el hospital está lejos.

 Conseguir una ambulancia o llamar a un taxi puede llevar tiempo y podría resultar muy mal en los momentos más críticos.

Tener su propio coche significa que puede ir y venir a su antojo. No hay que esperar en las paradas de autobús ni lidiar con rutas limitadas. El auto propio significa que tiene su propio horario y que tiene el control total de la ruta. Así, las horas que dedicaba a sus traslados podrá aprovecharlas en otras actividades más placenteras como pasar más tiempo en familia.

Además puede establecer sus propias reglas sobre las personas que suben al auto y sobre el uso de tapabocas según lo ameriten las condiciones. 
Eso sí que es libertad de movimiento y seguridad sanitaria. 
Otra ventaja muy agradable es que en sus trayectos podrá escuchar su propia música, al volumen que guste, o conversar con entera privacidad. 

En su propio auto, también puede trasladar a sus mascotas sin ningún problema.

2. Velocidad

El transporte público tiene rutas específicas y límites de horario muy particulares. ¿Qué pasa si tiene prisa y, aunque existe una ruta más rápida y directa, debe seguir la tortuosa ruta del camión? Puede incluso dar varias vueltas antes de llegar a su destino y, además, el camión se detiene varias veces para el ascenso y descenso de pasaje. Y eso es perder el tiempo.

Tener que esperar en la parada del camión tampoco es el uso más eficiente de su vida. Cualquier incidente, suyo o de los choferes, o cualquier descompostura mecánica puede significar que tenga que esperar en la parada del camión media hora o más. Eso es un fastidio cuando debe llegar a otros sitios.

Con auto propio, aunque tiene que respetar los límites de velocidad, elige a qué hora parte a su destino y qué ruta tomar para llegar a tiempo y lo más rápidamente posible. Un auto le permite ser dueño de su tiempo y resulta mucho mejor, más rápido y más cómodo que el transporte público.

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3.Costo sorprendente

El transporte público parece barato, si considera sólo un viaje a la vez. Pero esos viajes “sueltos” se van acumulando y, más pronto que tarde, se encontrará pagando una respetable cantidad; además, una vez gastado, no le queda nada. Si se traslada en su auto, después del viaje, el coche sigue siendo suyo y puede seguirlo usando o venderlo. Además, si mueve a toda la familia, el gasto en camiones resulta excesivo.

Ahora, por supuesto, un coche usado no es gratis. Comprar uno puede parecer una gran inversión, y cuestiones como el seguro y el mantenimiento también suman. Sin embargo, lo que puede sorprenderle es que, comparado con el costo y condiciones del transporte público, el costo de un auto bien vale el servicio que le brinda en cuanto a oportunidad, comodidad, seguridad, confianza, libertad y tiempo, no sólo para usted, sino para toda la familia.

4. Ubicación

El transporte público en Culiacán hace lo que puede para mover a muchas personas. Sin embargo, el mayor problema es que no pueden estar en todas partes y en el momento en que usted lo necesita. ¿Qué pasa cuando la parada de autobús queda lejos de casa o si no vive en zonas céntricas de la ciudad? ¿Y si llueve? ¿Y si hace mucho calor?

Tener su propio coche significa que puede viajar a cualquier lugar donde haya un camino, avenida, calle o carretera. Ya no tiene que preocuparse por la parada del autobús, de la temperatura, de la ruta o de la hora. Un automóvil lo hace dueño de los traslados dentro de la ciudad y fuera de ella. Las posibilidades que abre un automóvil propio para aprovechar las vacaciones no puede ofrecerlas ningún transporte público.

Si usted o su familia han tenido que lidiar con cualquiera de los problemas anteriores del transporte público y si quiere disfrutar de las ventajas del automóvil propio, usted debe considerar adquirir un coche usado.

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